SEÑALAMIENTO DE DEHESAS EN LOS MONTES DE TOLEDO ENTRE 1829 Y 1832
Javier Tordesillas Ortega
Antecedentes
Para comprender mejor el hecho de que la ciudad de Toledo entre 1829 y 1832 se viese obligada a delimitar de una serie de dehesas y términos municipales con sus correspondientes dehesas boyales es bueno retrotraerse en el tiempo. Así se podrán conocer una serie de hechos que la forzaron a ir renunciando a aquel gran señorío de los Montes de Toledo.
Sobradamente es conocido el inconformismo que durante siglos manifestaron los habitantes de los montes por su dependencia de Toledo y por los impuestos que debían pagar para engrosar las arcas de la ciudad. Se consideraban tratados injustamente y poco a poco algunas personas manifestaron su oposición deseosas de que se produjesen algunos cambios a su favor.
A continuación se irán presentando los hechos más relevantes en este sentido.
En la Llega celebrada en 1813 en la iglesia de Retuerta del Bullaque el sacerdote de esta localidad don Ezequiel Blanco Bermejo animó a los asistentes de la misma a redactar y firmar un manifiesto en contra de la dependencia de la ciudad, amparándose en la Constitución de 1812 se declaraban contrarios a pagar impuestos y reclamaban que se marcase un término para aquellos pueblos que no lo tenían. El manifiesto se hizo público por la ciudad de Toledo, el ayuntamiento mostró abiertamente su oposición y el obispo de Toledo llamó al orden al sacerdote y este se desdijo.
Hay que reconocer que aunque aquella reclamación, que no era la primera, no surtió ningún efecto inmediato, si sirvió de germen de posteriores demandas.
En la Llega celebrada también en Retuerta del Bullaque el 20 de octubre de 1820 ya de forma más firme se redactó un memorándum para dirigirlo al Consejo Nacional solicitando la supresión de impuestos y que se les permitiese pasar a depender del rey. Toledo de nuevo se opuso y les denunció por sediciosos ante el mismo Consejo de Castilla, la Diputación Provincial redactó un memorial en apoyo de los pueblos y este hecho supuso un claro enfrentamiento entre ambas instituciones.
Por entonces los pueblos ya se habían negado a pagar el dozavo y la Real Orden publicada el 23 de agosto de 1827 vino a darles la razón porque suprimía el pago de aquel impuesto, se señalasen los términos municipales, se les asignasen tierras comunales en función de sus habitantes y que también se les repartiesen tierras a estos. Se hizo el reparto de tierras en función del número de habitantes que tenía cada pueblo y adjudicaron a los ayuntamientos y a los vecinos directamente algunas de ellas. Ese mismo año se extinguió la Comunidad de Pastos de los Montes y la ciudad se vio obligada a ceder más de 500.000 fanegas. El 9 de febrero de 1829 se publicó una nueva Real Orden con instrucciones para efectuar el reparto.
El ayuntamiento de Toledo se avino de mala gana a que se señalasen un total de 72 dehesas para ser subastadas o adjudicadas por tasación, con obligación de ponerlas en producción roturándolas y cultivándolas en un plazo de dos años.
Así mismo, se señalaron dehesas que la ciudad se reservaría para leña de carboneo y 14 términos municipales con sus correspondientes dehesas boyales.
A pesar de todo, el ayuntamiento no aceptó nada de aquello y presentó una reclamación que fue desestimada.
Posteriormente una Real Orden de 1836 suprimió los señoríos en base a lo que ya ordenaba el Real Decreto de 6 de agosto de 1811 y que en su día no entró en efecto. Aquel Real Decreto no solo suprimía los señoríos sino que ordenaba dejar libre de uso para los pueblos los aprovechamientos de los recursos naturales siempre que se ajustasen al derecho común.
La ciudad de Toledo al final perdería todas las tierras que poseía en los Montes de Toledo y la mayoría de ellas fueron a parar a manos privadas.
SeÑALAMIENTO DE términoS Y deHESAS
EN LOS MONTES DE TOLEDO 1929 – 1932
Como ya se ha visto la Real Orden de 31 de agosto de 1827 dada por Fernando VII supuso un gran paso para que se iniciase el proceso de desaparición del señorío de los Montes y en la del 9 de febrero de 1829 ya se daban instrucciones concretas para que se pusiese en marcha.
El Ayuntamiento de Toledo no quería entrar en razones y tuvo que intervenir el Intendente de Hacienda, representante del gobierno en la provincia, para que se pusiese en marcha el procedimiento de enajenación. Finalmente se llegó al acuerdo de constituir una comisión que sería la encargada de llevar a cabo los trabajos pertinentes para poner en práctica la Real Orden. Dicha comisión se denominó “Comisión de señalamiento de términos y dehesas de los Montes de Toledo” y estaba constituida por un representante de la Intendencia, un representante del Ayuntamiento y dos agrimensores designados uno por cada una de las instituciones. Los trabajos se iniciaron el 1 de marzo de 1929 y se concluyeron el 30 de mayo de 1932.
Para marcar los términos y dehesas primero se tuvieron que realizar los trabajos de campo con el fin de señalar los límites, medir y clasificar el terreno según su calidad y después se efectuaron los trabajos de gabinete para confeccionar los planos y redactar los informes correspondientes para cada una de las demarcaciones practicadas.
Plano de Piedras Picadas y Robledo de la Cueva. Navas de Estena
Plano de La Toledana y Gargantilla. Navas de Estena
Los planos se rotularon a tinta y la mayoría de ellos se colorearon con acuarelas. En cada uno de ellos se distinguen las siguientes partes:
– El plano propiamente dicho con la representación de su espacio natural y con los elementos más significativos numerados. Junto al plano aparece una escala con la indicación “Escala de 500 Estadales de a 11 pies” y una rosa de los vientos o una flecha para mostrar su orientación.
– Una casilla con la rotulación que sirve de identificación del plano.
– Otra segunda casilla con la leyenda de los números empleados en el plano. Es un listado de los topónimos con que se denominaban cada uno ellos.
En las memorias se recogen los siguientes datos: fecha de realización de los trabajos de campo, lindes, servidumbres (caminos), abrevaderos, clases de tierras, valoración de cada clase, colmenares y la “memoria geodística” que consiste en una serie de comentarios y recomendaciones del uso que se podría dar a cada tipo de terreno. Los textos son bastante curiosos en cuanto que reflejan las opiniones de aquellos que las redactan y muestran la mentalidad de la época.
A veces los textos de estas memorias se repiten, utilizan los mismos para diferentes dehesas.
Después del señalamiento de los términos y de las dehesas Toledo siguió oponiéndose a todo lo realizado, planteó una reclamación y esta fue desestimada.
LOCALIDADES DE LOS MONTES DE TOLEDO DONDE SE MARCARON TÉRMINOS Y DEHESAS ENTRE 1829 Y 1832
LOCALIDAD | Nº PLANOS REALIZADOS |
Alcoba de los Montes | 14 dehesas + 1 término y dehesa boyal |
Arroba de los Montes | 1 dehesa + 1 término y dehesa boyal |
Fontanarejo | 2 dehesas + 1 término y dehesa boyal |
Hontanar | 3 dehesas + 1 término y dehesa boyal |
Horcajo de Montes | 9 dehesas + 1 término y dehesa boyal |
Molinillo, El | 14 dehesas + 1 término y dehesa boyal |
Navahermosa | 1 término y dehesa boyal |
Navalpino | 10 dehesas + 1 término y dehesa boyal |
Navalmoral de Toledo | 1 término y dehesa boyal |
Navalucillos de Toledo | 3 dehesas + 1 término y dehesa boyal |
Navas de Estena | 11 dehesas + 1 término y dehesa boyal |
Retuerta del Bullaque | 9 dehesas + 1 término y dehesa boyal |
San Pablo de los Montes | 1 término y dehesa boyal |
Ventas con Peña Aguilera | 1 término y dehesa boyal |
TOTAL | 72 dehesas + 14 términos y dehesas boyales |
NOTA: Se hicieron 8 planos de dehesas compartidas por dos términos.
TIPOS DE PLANOS REALIZADOS:
– Planos topográficos de dehesas para ser subastadas o adjudicas por tasación en los Montes de Toledo: 72
– Planos topográficos de dehesas destinadas para leña de carboneo para la ciudad en los Montes de Toledo: 5
– Planos topográficos de términos y dehesas boyales: 14
Señalamiento de espacios destinados a carboneo
para la ciudad de toledo – 1830
Uno de los recursos que Toledo obtenía de los montes era el carbón, materia imprescindible para la vida de la ciudad ya fuese para uso doméstico, en instituciones o para los talleres artesanos que lo necesitaban. Se elaboraba por toda la geografía de los Montes de Toledo, se pagaba el impuesto de humazgo por su obtención, era trasladado en carretas y su comercialización estaba fiscalizada, sobre todo en la ciudad.
Para la corta de leñas debía de obtenerse un permiso o licencia que era emitido por los guardas de monte dependientes de la Junta de Administración del Abasto del Carbón.
El carbón de mejor calidad se elaboraba con las leñas de encina, pero también se hacía con las de roble y quejigo. Igualmente, se hacía algo de carbón con las raíces de brezo (“berezo”), pero este se destinaba para su utilización en las fraguas.
El estado general del monte era de un claro deterioro puesto que en algunas zonas se cortaban demasiados árboles sin el referido permiso porque se hacían cortas ilegales. Si los infractores eran descubiertos se les enjuiciaba y se les aplicaban multas.
En Toledo no se podían permitir quedar sin las provisiones necesarias de carbón y para ello se marcarían unas fincas reservadas para obtener leñas y con parte de ellas elaborarlo. Para conocer el espacio que se necesitaría se solicitó un informe al Contador de Real Abasto del Carbón y el 19 de enero de 1830 se expedía una certificación de que en Toledo entre 1825 y 1829 se habían consumido 131.784 fanegas de carbón.
Los señalamientos y mediciones fueron dirigidos por los peritos agrónomos Julián Antonio López, Alfonso Crespo y Antonio Arriete. Redactaron un expediente en el que se iban indicando “los trozos” que se destinarían a carboneo, sus límites, su superficie en fanegas, las características y estado de su arbolado, la valoración de los terrenos y producción estimada que se podría obtener de carbón.
En el siguiente cuadro se presentan los espacios reservados para carboneo y la superficie de cada uno de ellos.
ESPACIO |
Nº FANEGAS |
Sierra del Puerco, Malamonedilla y Solana de la Trabiesa |
3800 |
Sierra de las Particiones |
330 |
Valle de las Truchuelas y la Silla |
650 |
La Lancha y Boca de las Viborillas |
3080 |
La Parrilla |
2900 |
Muelas |
2000 |
Las Veredillas |
1500 |
Trozo entre San Pablo, Hontanar y Robledo de Montalbán |
8016 |
El Almadén |
14140 |
8 Colmenares |
32 |
Total |
36416 |
SEÑALAMIENTOS REALIZADOS EN NAVAS DE ESTENA
En el entorno de Navas de Estena se procedió a señalar un total de 11 dehesas, además del término con su dehesa boyal. Fueron las que se indica en la siguiente tabla:
DEHESA |
FANEGAS |
Avefrías |
4000 |
Campillos y Robledo de Ciguiñuelas |
3600 |
Chiquillas y Cerro de las Viñas |
2160 |
Garbanzuelo |
3848 |
Gualí, El |
3980 |
Peralosas de Abajo, Las |
4000 |
Peralosas de Arriba y Vallemolino |
3840 |
Piedras Picadas y Robledo de la Cueva |
3960 |
Riofrío, Cerezo y Marillán |
4000 |
Robledo de los Charcos y Valle Candilejo |
3942 |
Toledana y Gargantilla |
2760 |
TOTAL |
40090 |
Término y dehesa boyal |
4878 |
NOTA: Las Peralosas de Abajo y Las Peralosas de Arriba y Vallemolino en los archivos de la Diputación Provincial de Toledo ambas figuran como pertenecientes a los términos de Horcajo de los Montes y Navas de Estena.
El Gualí figura como de Navas de Estena y desde que se marcaron los términos municipales hacia 1882 ha pertenecido al término de a Hontanar.
Al ser muy prolijo el presentar aquí todos los planos y expedientes de los trabajos realizados en Navas de Estena únicamente se presentarán los de las fincas de Garbanzuelo, Las Chiquillas y Cerro de la Viñas y los del término municipal.
1 – SeÑALAMIENTO DE LA DEHESA DE GARBANZUELO
MEMORIA:
FECHA:
13 de julio de 1830.
SUPERFICIE:
“3848 fanegas, incluidas 14 fanegas de la casa del Garbanzuelo, una pequeña casa muy mala, que pertenece a la capellanía fundada en Retuerta por Juan de Cristóbal, y dos colmenas. Jaras, brezos, robles, quejigos y encinas, pero por las rozas se ha destruido la mayor parte del arbolado precisándose 25 años para recuperarlos, prohibiendo durante diez años el pasto de ganados.”
LINDEROS:
“Linda por norte con el Río Estena desde la revuelta cortando por la caída de los riscos de la cuerda de Fuente el Caño, subiendo derecho a un risco donde se ha hecho un coto a la derecha del camino de los Alares. Poniente sigue todo el Río Estena abajo hasta llegar al cejo primero pasado el Cerro de los Peñales, llamado de las Navezuelas, cuyo risco o morrete vierten sus aguas a la boca del arroyo de los castaños, unas, y otras al de las Urraleras. Sur desde dicho punto donde termina la línea anterior en el río Estena, sube a la cúspide de dicho morrete, y por la cuerda arriba descabeza en la oya bragada, sube al cerro del Valle del Lobo, cae por la ladera del colado de la Cebada, y sigue por lo alto de la cuerda de la Parra, continúa el cerrillo de la Hera de Majuelejo, descabezando el valle de este nombre, y de aquí se dirige línea recta a la cuerda de piedras picadas, atraviesa el valle de este nombre, de donde sube a la loma de los castaños, de donde corta línea recta, atravesando la cabecera del Valle de los Castaños, y termina en lo alto de la cuerda, que da vista a Valeruelo en la línea de la dehesa que nuevamente se ha acotado con el nombre de Chiquillas, y cerro de las Viñas. Oriente empieza donde termina la línea anterior lindando con la citada dehesa, por lo alto de la cuerda aguas vertientes a las Chiquillas, viene por lo alto del cerro de las Viñas, hasta el puerto del camino que de Navas de Estena va a Garbanzuelo, en cuyo punto empieza a lindar con el término nuevamente señalado a Navas de Estena, revolviendo a buscar lo alto de la cuerda de los Parrales, atravesando la cabecera del Valle de la Poveda, en cuyo sitio continuando con dicho término sigue por lo alto de la cuerda de los Parrales, a buscar un coto que se ha hecho en lo alto del Portezuelo del camino de los Alares, a uno de los riscos de las Torrecillas donde se ha hecho otro, y de donde baja el Río Estena, frente de la cuerda o riscos de Fuente el Caño que es donde se empezó.”
SERVIDUMBRES:
“Camino de Portezuelo de la Sierra del Ramiro a los Alares; otro que por el puerto de Valeruelo se dirige a la hoz de las Cigüeñuelas, al que se une el que va por el Puerto del Garbanzuelo.”
ABREVADEROS:
“El río Estena que se comparte con las dehesas vecinas.”
TASACIÓN:
“Clases Fanegas Precio Valor Sale la fanega Réditos
1ª 150 200 30000 a 4r. 400
2ª 400 100 40000 a 2r. 400
3ª 500 50 25000 a 1r 400
4ª 2376 20 47520 ½ 611
5ª 400
3826 142520 2850”
COLMENARES:
“Dos colmenares, uno es de Juan Rodríguez de Lara vecino de Navas de Estena, situado en la Casquera de los Parrales. Otro de Ignacio García en el sitio de La Poveda”.
MEMORIA GEODÍSTICA:
“Si se consulta la opinión de todos los autores agrícolas encontraremos que todos prefieren para la labor del arado al buey sobre los demás animales, y efectivamente a sus razones quedó convencido el entendimiento en disposición de no tener que dudar ni lo más mínimo, pero a veces aunque se conozcan las ventajas, y aunque se quiera y desee el hacerlo, no se puede y hay necesidad de acomodarse de las circunstancias de los terrenos para tener mejores resultados. Todo labrador que quiera hacer la suya con bueyes, necesita antes de hacerse con ellos, proporcionarse pastos naturales con que sostenerlos al menos desde mediados de marzo hasta primeros de julio, porque desde aquel tiempo no apetecen el pienso, y siguiendo en él se ha observado que suelen perder la vista; si la dehesa que ha de labrar carece de dichos pastos, la labor de bueyes le podrá ser más costosa que la de caballos o mulas, y por lo tanto todo el adquisidor de terrenos en los montes de Toledo, debe antes de establecer su labor examinar detenidamente su dehesa, para ver si tiene o no los pastos necesarios y útiles al ganado boyuno que quiera invertir en su labranza teniendo en consideración si ha o no de tener rebezo pues que entonces es visto que necesita algunos pastos más, pues aunque pueda decirse que un par de rebezo equivale a dos sin rebezar sin embargo no siempre sucede así, y como que es más el número, hay más posibilidad de que haya algún enfermo, por cuya falta debe haber alguno también de más.
Se recomienda dedicar a cereales el cerro de los Majadales, el de los Cebadales, el Garbanzuelo y el Majuelejo. Para frutales la ribera de los arroyos de los Castaños y la Poveda, y mantener la huerta existente. Limpiar malezas y formar monte hueco. Tiene pastos para ganado vacuno y lanar de vacío, y con mejoras para lanar de cría. Fomentar las posadas de colmenas en las solanas inmediatas al río Estena. Sobre las ruinas de dicha casa que ha sido quemada después del señalamiento podría hacer la suya de labor y labrar todas las cercanías”.
2 – SEÑALAMIENTO DE LA DEHESA DE LAS CHIQUILLAS Y CERRO DE LAS VIÑAS
FECHA:
9 de julio de 1830.
SUPERFICIE:
“Poblada de árboles bravos como quejigos y rebollos, y el resto de jaras, ladona y parrasolada. 2166 fanegas y un colmenar, de las que son útiles 1922.”
LINDEROS:
“Linda por oriente con la dehesa nuevamente acotada con el nombre del Gualí, que empieza en el coto que se ha hecho en el cejo del Cerro de Navaelsauce, que divide la citada dehesa, y el término nuevamente acotado a este lugar de Navas de Estena, siguiendo por los risquillos, y cejo que vierte a las Chiquillas de Arriba por la confluencia de los dos arroyos de las fresnedas de las chiquillas de arriba terminando en un coto que se ha hecho en lo alto del Cerro de las Cabezadas. Sur desde el sitio donde termina la línea anterior, viene por lo alto de la mesa del Cerro de las Cabezadas, lindando con la dehesa de Valle García, hasta el camino y colada que por Valeruelo va a la Retuerta, desde cuyo punto sigue a lo alto del Risco del Cuervo, lindando con la dehesa nuevamente acotada en jurisdicción de la Retuerta, nominada el Carrizal. Poniente desde el risco del Cuervo donde termina la línea anterior, viene por lo alto de la cuerda de dicha sierra, atraviesa el puerto y camino que por Valeruelo se dirige a la casa de Garbanzuelo, sigue por lo alto del Cerro de las Viñas, de donde se dirige a lo alto del puerto, y camino que de Navas de Estena va a dicho Garbanzuelo. Norte desde dicho punto cruzando el dicho camino, baja atravesando el Postrerillo de (blanco) siguiendo línea recta cruza el camino y colada que de Retuerta viene a Navas de Estena, atraviesa las Cerradillas, y sube a lo alto del Cerro de Nava el Sauce, terminando en el coto donde se empezó”.
SERVIDUMBRES:
“Camino de Navas de Estena a Retuerta, y otro camino de Retuerta a Garbanzuelo.”
ABREVADEROS:
“El que hay por bajo de las Fontanillas con una huerta de Manuel Villa alias Ratita vecino de Retuerta; otro lodado en la falda del cerro de las Viñas al que con poco costo se le aclaran los caños y se sujetan las aguas.
TASACIÓN:
“Clases Fanegas Precio Valor Sale la fanega Réditos
1ª 100 200 20000 a 4r. 400
2ª 200 100 20000 a 2r. 400
3ª 400 50 20000 a 1r 400
4ª 1222 25 30550 ½ 611
5a 240
2162 68600 1811”
COLMENARES:
“Un colmenar de Román Fernández, vecino de Retuerta, próximo a las Fontanillas.”
MEMORIA GEODÍSTICA:
“Una de las más agradables ocupaciones para el hombre es el cultivo de los campos en cuyas faenas encuentra con placer al fin de ellas la recompensa de sus fatigas. Los trabajos de los talleres obligan al hombre a encerrarse sin ver más que las cuatro paredes que le rodean ni a respirar mas aire que el fétido y condensado que las más veces encierran los aposentos malamente construidos, y las menos a propósito al objeto a que sirven, mas el que se dedica al cultivo del campo, extiende su vista a todo cuanto alcanza el horizonte que le rodea, y el aire libre que respira le vivifica y anima para continuar en sus tareas. Mil graciosos objetos se le ofrecen a la vista, y si tiene algún gusto a las bellezas de naturaleza, no pueden jamás faltarle placeres puros y verdaderos; la deliciosa fragancia que exhalan las flores de primavera le embalsaman, y el cántico suavidulce de las aves le encanta y embelesa, haciendo más y más halagüeña y deleitable la mansión del campo y la variedad de objetos y ocupaciones que proporciona la agricultura, aleja de sí el fastidio y tedio inseparable de la monstruosa uniformidad. Que variedad de árboles y plantas de frutos no hace salir el cultivador de la tierra, y qué placer para un buen padre de familias cultivador que dejará en cada árbol a sus hijos y nietos no solo un objeto respetable digno de su imitación, sino un recuerdo tierno y amoroso al afán y previsión con que preparó aun para después de sus días la mejor suerte y felicidad de los que tanto le interesaban.
El cultivo del campo es sin duda el más digno de los trabajos, y el primero a que todos debemos dedicarnos más esencialmente y por eso el sabio monarca que nos gobierna no cesa de proporcionar medios a sus vasallos para que se dediquen a él como fuente y origen de donde dimanan todas las riquezas.
Clima templado, la nieve dura muy poco sin deshacerse. Monte destruido por las cortas, rozas y quemas en la mayor parte, siendo lo útil roble, quejigo y fresno, y lo demás es jara ladona y paralosada, ahulagas, madroño y otros arbustos de monte bravo. Pastos para ganado vacuno y caballar. Se recomienda limpiar el sitio de la Fresnera y la umbría de la sierra de las Viñas, formando monte hueco para aprovechar maderas y bellota, crear pastos y abrigo en invierno y sombra en verano. Podrán sembrarse cereales en las Chiquillas y las Cerradillas, viña y oliva al este y sur del cerro de las Viñas, y frutales en las inmediaciones de la huerta del guarda de la finca. Recoger aguas de los manantiales para formar abrevaderos.”
3 – SeÑALAMIENTO DEL término y DEHESA boyal
Este plano es el único de todos los realizados que está sin terminar puesto que le faltan la rotulación para indicar el espacio que representa, la numeración, la leyenda y la orientación.
Se desconocen las razones por las que se dejó así.
Más adelante se hace una interpretación de él para facilitar su consulta.
FECHA:
5 de julio de 1830.
“La comisión se traslada desde Retuerta a Navas de Estena.”
“6 de julio: resultando de ella ser el número de vecinos que tiene este pueblo treinta y dos, el de yuntas de labor veinte y dos; que en el año pasado tuvieron sembradas cincuenta fanegas de tierra; que el número de cabezas de cabrío son doscientas treinta, en ellas ciento sesenta de vacío; el de cabezas de vacuno cincuenta y cuatro con inclusión de las yuntas que van expresadas, y en ellas hay cuarenta y dos de vacío. Cabezas de cerda, treinta y en ellas veinte y cinco de vacío; y el número de colmenas comprendido en la dezmería cuatrocientas, todo lo que certifica con referencia a las relaciones dadas por los vecinos”. Félix García de Cuerva.
8 de julio concluye la medida del término.
CERTIFICACIÓN DE LOS PERITOS AGRIMENSORES:
“Certificamos y juramos que en cumplimiento de lo mandado en la real orden de 27 de agosto de 1827 y de acuerdo por unanimidad de los demás señores que componen esta comisión y con proporción al número de vecinos que al presente tiene este lugar de Navas de Estena, el que según la certificación dada por el secretario de su ayuntamiento son treinta y dos vecinos, a cuyo respecto hemos hecho el señalamiento de término proporcionado a dicha población y atendiendo a su fomento lo hemos verificado en la forma siguiente.
Para labor atendiendo y considerándoles veinte y seis yuntas de bueyes y procurando su fomento, señalamos para cada una setenta fanegas de tierra, las que dividirán en tres hojas, en los sitios de Navaquemada, Arroyo de la Becerra y Solana del Cerro de Navalsauce, con las vegas de Fuente fría y ribera del arroyo de los reales resultando que para el expresado fin señalamos por las veinte y seis yuntas a las setenta fanegas dichas mil ochocientas veinte 1820.
Para los seis vecinos braceros tres suertes de a cuatro fanegas una en cada hoja a cuyo respecto señalamos para dicho fin setenta y dos fanegas 72.
Para plantíos de viña y oliva (plantas desconocidas en este pueblo) señalamos ciento veinte y ocho fanegas las que podrán plantar en la solana del Cerro de Altamira y caídas del Cerro de la Iglesia 128.
Para pastos además de los que produzcan la hoja que debe estar descansando, las gramas de las de barbecho y el rastrojo de la sembrada señalamos novecientas fanegas 900.
Para dehesa boyal con proporción a las expresadas yuntas, y al respecto de ocho fanegas por cada una, son doscientas ocho 208.
Por lo que resulta ascender lo señalado para los fines expresados la cantidad de tres mil ciento veinte y ocho fanegas.
Comprende dentro del área del recinto expresado un trozo de sierras, la mayor parte de ellas inaccesibles, huecos y quebradas de arroyos, local del pueblo y su ejido, los caminos y coladas que atraviesan por el expresado término, y los grandes bancos de roca primitiva o bien sea pizarra silícea que todo es inútil y asciende a mil setecientas cincuenta fanegas 1750.
Total 4878
Por lo que resulta comprender toda el área del término señalado la cantidad de cuatro mil ochocientos setenta y ocho fanegas de a 500 estadales marco real de Toledo.”
ABREVADEROS:
“Declaramos como abrevaderos comunes a todos los vecinos y sus ganados todos los manantiales que hay dentro del área de su recinto sin que ningún vecino pueda apropiárselos, pudiendo sí hacer uso de las aguas sobrantes después de dejar el surtido necesario al público, y menos podrá cercar los sitios que los produzca ni a pretexto de plantíos, pues caso que lo haga alguno, ha de ser sin perjuicio del abrevadero común. Asimismo declaramos como siendo la raya divisoria de este término el arroyo de las Becerras, hasta la Rinconada de Fuentefría, quedando de abrevadero común para este término y la Dehesa de las Aves frías en el que para evitar mutuas desavenencias establecemos la cláusula de que no han de poder denunciarse mutuamente ni penarse los ganados que ya de una como de otra parte se crucen la distancia de cuarenta y cinco varas castellanas, salvo el caso de que esté plantado o sembrado, para cuyo fin se dejará así en el término como en la expresada dehesa la amplitud correspondiente para abrevadero en los cruceros de los caminos. Los abrevaderos generales que quedan al término de esta población son el arroyo de los reales desde que sale de la Dehesa del Guali hasta que entra en Estena, el de las Becerras y trozo del río Estena, el chorrero de fuente el Caño, Fuentefría, Arroyo del Chorrito y el de Santa María.”
SEÑALAMIENTO DE SITIOS PARA MONTE:
“En cumplimiento de lo prevenido en la real orden que motiva esta operación y por lo interesante que es a la salud y fomento público con beneficio común así para los vecinos como para el reino el fomento de arbolado; hechos cargo de los sitios que dentro del área del término señalado la naturaleza lo indica, por el que se ve espontáneamente producido aunque bravo, y a discreción de la misma, señalamos para que se guíe, cuide y fomente todo el que hay de las clases de encina, quejigo y rebollo en la sierra de Fuente fría y Valle del Ramiro; el que de la misma clase hay dentro de la dehesa boyal; en cuyos sitios se guiará para que sea monte alto, hueco que pueda pastarse libremente salvo los casos que estén de tallar. Igualmente en la hombría del Cerro de Nava el Sauce, y se deberá guiar el quejigo de que está poblado, entresacando de modo que queden de doce a quince pies por fanega de tierra para que de este modo pueda labrarse y pastarse sin perjuicio del arbolado, en el que tendrán un recurso para maderas y carboneo. Igualmente declaramos que en el resto del término fuera de los sitios expresados que están poblados de jaras, brezos, espinos, retamas y otros arbustos inútiles, los que podrán descepar y descuajar libremente sin cuyo requisito será el terreno como hasta aquí inútil por impedir su espesura de raíces y ramas, el producir pastos, y menos siembras algunas, por lo que dejamos hecho el señalamiento para las clases expresadas en este concepto, y por lo que con arreglo a la soberana voluntad de SM hemos hecho la clasificación que dejamos expresada.”
SEÑALAMIENTO DE DEHESA BOYAL:
“En cumplimiento de lo mandado por SM en la precitada real orden separamos del todo de lo acotado para el expresado término un trozo para dehesa boyal o de propios en el mismo sitio que de antiguo le tenía señalado el Ilmo. ayuntamiento de la ciudad de Toledo en el que según el vecindario y bajo las bases establecidas por punto general, le corresponde tener doscientas ocho fanegas útiles de a 500 estadales marco real de Toledo y en el que por razón de los caminos que la atraviesan y grandes bancos de pizarra que en él hay, resulta comprende todo su área, cuatrocientas doce fanegas y en ellas doscientas cuatro inútiles. Y linda por sur desde la subida del Puerto del Garbanzuelo parte línea recta mirando a las Cercadillas, hasta el camino que de la Retuerta viene a esta población. Oriente linda con el camino y colada que de este pueblo va a la Retuerta. Norte chorrera que atravesando dicho camino sigue y atraviesa también el que va a los Alares por la Sierra del Ramiro. Poniente desde el camino que va a los Alares y boca del arroyo del Chorrito sube cortando a media ladera de la sierra a encontrarse con el coto que hay a la subida del Puerto del Garbanzuelo.”
LINDEROS DEL TÉRMINO:
“Linda por norte desde lo alto de la loma, aguas vertientes al barranco de la Fuente el Caño, de donde sube a lo alto de la sierra de Fuente Fría, bajando por la pedriza de la Rinconada, y baja atravesando la Vega de Fuente Fría hasta llegar al río Estena, subiendo este arriba hasta encontrarse con el Arroyo de las Becerras, y termina en un coto que se ha hecho en el cejo del Arroyo de los Reales, sube este arriba noventa estadales de a once pies castellanos, de donde atraviesa el arroyo por el risco alto y se dirige a la cumbre del Cerro de la Iglesia, aguas vertientes al término; de cuyo sitio baja y atraviesa el camino que de Navas de Estena va a San Pablo y sube a lo alto del cejo, umbría del Cerro del Sauce, aguas vertientes a la Fresneda, siguiendo este cejo adelante desde el coto donde termina la línea anterior baja línea recta atravesando por las Cerradillas, cruzando el camino de la Retuerta, dirigiéndose línea recta al Puerto del Garbanzuelo por el Postuerillo de ____________ sube a lo alto de dicho puerto y se dirige línea oblicua inclinada como a mano derecha al cejo de la cuerda de los Parrales, aguas vertientes al principio del arroyo de la Pobeda. Poniente desde el punto donde termina la línea anterior sigue por lo alto de la cuerda de los Parrales a buscar el risco de la Torrecilla, aguas vertientes al valle y Postuero del Ramiro de donde baja al río Estena y sube a buscar la cuerda de la Sierra del Chorrero de Fuente el Caño, y termina en el coto primero que se estableció en la línea del norte.”
SERVIDUMBRES PÚBLICAS:
“Atraviesan por este término los caminos que todos deben servir de coladas para los ganados que trasumen por ellos, las que deberán entenderse y constar su ancho de 45 varas castellanas, tomando por centro los expresados caminos los que son los siguientes: el que de esta población sale para Navalucillos. Igualmente el que sale para San Pablo. El que sale para la Retuerta. El que sale para los Alares. El que sale para el Puerto de Garbanzuelo. Todos los que se hallan establecidos así de antiguo, y en los que como servidumbre pública no puede hacerse novedad, ni tampoco en la tasación se le da valor.”
TASACIÓN:
“Enterados de la clase y calidad de que se compone el expresado término que hemos señalado al citado lugar de Navas de Estena, después del más exacto y prolijo examen, hechos cargo del estado que en la actualidad tiene, y de los gastos que hay que hacer para reducir a cultivo los sitios que dejamos señalados, sin cuyo requisito es y será un terreno inútil, y con presencia de las reglas y observaciones que se deben sentar por base para la tasación de términos y la diferencia que hay de estos a las dehesas por ser en estas exclusivos todos los aprovechamientos, y en los términos comunales a todos los vecinos según las observaciones de los más célebres geopónicos, hemos clasificado y con arreglo a su calidad puesto el valor que cada uno según ella se merece, para deducir con respecto a su capital el rédito que ha de pagarse a la ciudad de Toledo en remplazo del dozavo que SM ha abolido, cuyos precios son los siguientes.
Clases Fanegas Precio Valor Sale la fan. Rédito Término
1ª 150 100 15000 a 2 300
2ª 200 40 8000 a 0,27 20/100 160
3ª 500 20 10000 a 013 60/100 200
4ª 2070 10 20700 a 0,6 80/100 414
5a 1546
4466 53700 1074
Dehesa boyal
1ª 100 150 15000
2ª 50 50 2500
3ª 58 25 1450
4ª 204 18950
Por lo que resulta tasamos vale el término señalado al expresado lugar de Navas de Estena la cantidad de cincuenta y tres mil setecientos reales y con respecto a este capital, el rédito anual el de mil setenta y cuatro reales, en el que está considerado y refundido en los precios puestos el si las rañas, sierras y riscos tienen algún aprovechamiento. Y la dehesa boyal o de propios es la cantidad de diez y ocho mil novecientos cincuenta reales.
Cuya medida, señalamiento, reconocimiento y tasación están bien y fielmente ejecutados en lo que nos afirmamos y ratificamos. Y para que conste lo firmamos en este lugar de Navas de Estena a quince de julio de mil ochocientos treinta. Julián Antonio López. Nicolás Martín del Yerro. Félix García de Cuerva”.
“… habiéndome acometido una indisposición con calentura…”
INTERPRETACIÓN DEL PLANO DEL TÉRMINO Y DEHESA BOYAL DE NAVAS DE ESTENA
Lo que parecía estar zanjado no lo fue así. En 1855 se aplicó la desamortización de Madoz, la ciudad de Toledo perdió todas sus tierras en los Montes de Toledo, se desposeyó a los ayuntamientos de la mayoría de las tierras que les habían sido adjudicadas, se dejaron algunas como montes públicos y la inmensa mayoría de lo que fue aquel señorío salió a subasta pública en lotes de considerable superficie. A las subastas accedieron gentes adineradas y ávidas de tierras que se hicieron con la propiedad de todas aquellas fincas.
¡Nacieron los latifundios de los Montes de Toledo!
El término municipal actual de Navas de Estena se delimitó en 1882 y el plano del mismo se levantó en 1884 (puede consultarse el trabajo “Delimitación del término municipal de Navas de Estena en 1882”).
NOTA:
Toda la documentación elaborada en el proceso de señalamiento de términos y dehesas, tanto planos como informes, se encuentra depositada y debidamente clasificada en el Archivo de la Diputación Provincial de Toledo. Los planos se pueden consultar en el Archivo y Biblioteca Digital de la página web de la propia Diputación.
Navas de Estena, 20 de septiembre de 2024
Javier Tordesillas Ortega